05 diciembre, 2005

LA NUEVA ESPAÑA 4-12-05 Río Narcea G.M. rechaza las denuncias de Greenpeace

Río Narcea asegura que sus vertidos de arsénico están dentro de los límites legales. La compañía minera rechaza las denuncias de la organización Greenpeace

Oviedo

La dirección de Río Narcea Gold Mines, la empresa que explota las minas de oro de Belmonte y Carlés (Salas), aseguró ayer que cumple escrupulosamente la legislación sobre vertidos. Según la compañía, los índices de arsénico de las aguas que salen de la explotación de Carlés están dentro de las cantidades permitidas por la ley. La empresa salió al paso de las denuncias realizadas el jueves por la asociación. De acuerdo con la información facilitada por la organización ecologista, los vertidos de la compañía al río Narcea contienen «elementos tóxicos peligrosos y perjudiciales para la salud». Greenpeace añadió que los niveles de arsénico «sobrepasan más de seis veces los límites permitidos por el real decreto 995/2000 por el que se fijan los objetivos de calidad para determinadas sustancias contaminantes». Una portavoz de Río Narcea Gold Mines negó todos estos extremos: «La muestra de las aguas que salen de la explotación de Carlés recogida por Greenpeace, tiene 300 partículas por billón (ppb), si se dan por buenos los análisis de la asociación ecologista. Aun así, estarían 200 partículas por billón por debajo de lo permitido, y no 6,5 veces más de lo autorizado por la ley». Para evitar confusiones, la empresa precisa que el tope legal cambia según se trate de aguas potables -en este caso, el índice máximo de arsénico permitido se reduce a 50 partículas por billón- o de vertidos. «Todos los análisis realizados en el Narcea río abajo de la salida de aguas provenientes de la explotación de Carlés están por debajo de los límites de detección y, por supuesto, son muy inferiores a los que establece la ley para las aguas destinadas a consumo humano y/o para salmónidos». Río Narcea asegura, además, que sus relaciones con la Consejería de Industria, la Consejería de Medio Ambiente y la Confederación Hidrográfica del Norte «son continuas y fluidas, para garantizar el cumplimiento de la normativa aplicable al sector». Jorge Marquínez, presidente de la Confederación Hidrográfica del Norte, anunció el viernes que la Comisaría de Aguas comprobará la denuncia de Greenpeace y que, de ser cierta, ejercerá «las medidas que sean necesarias».