LA NUEVA ESPAÑA 25-09-08 El síndrome del jersey amarillo
Si cada dos meses se retrasa un año la finalización de la autovía Oviedo-La Espina, ¿no necesito hacerte los cálculos para saber cuándo estará lista, verdad?
-No, no lo necesitas querida Elvira.
-¿Y nadie dice nada? ¿Qué es de aquellos que exigían en su momento cumplir plazos? ¿Aquellos que denunciaban un contubernio del Gobierno central?
-¡Qué sé yo! Estarán haciendo abdominales.
-Je, je. Pero no todos, que algunos ya no están para esos trotes.
-Sobre todo si quieren llegar a las dos mil.
-Pero que no te sorprenda. Eso es un caso típico del «síndrome del jersey amarillo», y tiene su momento. Ya sabes, alrededor de los cincuenta.
-¿¿¿???
-Sí mujer. Se pasan una juventud seria y formal con el culo pegado al asiento estudiando oposiciones y a cierta edad, sintiéndose triunfadores, se dan cuenta de que no han disfrutado de la vida. Se compran un descapotable, se atan un jersey de punto sobre los hombros, preferentemente amarillo huevo, y aparecen morenos todo el año. Cambian de pareja, suelen elegir una chica joven y llamativa, y a darlo todo en los lugares de moda. Se convierten en los reyes del sarao. A eso le añades melenilla y bigote y ya tienes un prototipo. Una buena amiga, que se mueve en los ambientes de la jurisprudencia, dice que son una plaga.
-¿Tu amiga es abogada? -me sorprende bastante que una gallina ejerza ese tipo de profesión-.
-No exactamente. Su pareja sentimental trabaja de despertador en un bufete. Un buen empleo, se aprende mucho.
-Ya me imagino, ya. El caso es que, estén haciendo o no abdominales para ponerse más cachas que Rambo, no oímos entre los ediles y concejales, presidentes del Principado, diputados autonómicos por la circunscripción de Occidente o delegados del Gobierno del partido en el poder voces que reclamen algo de seriedad y respeto por el Occidente astur, que ya está bien de cachondeo. Cuando se licitaron tramos en la anterior legislatura todo fue bombo y platillo, e incluso alguno los incluía entre sus logros municipales ¿Cómo rellenarán ahora los folletos a todo color? ¿Con qué cara seguirán echando la culpa a la oposición de todos los retrasos habidos y por haber? Ya lo decía Maleni en su exquisito lenguaje de bata y zapatillas: las obras de las grandes infraestructuras son como las de una casa. Sabes cuándo empiezan pero nunca cuándo acaban. Y esto lo dice toda una señora ministra. Ver para creer.
2 Comments:
Su Fermín llenará el próximo álbum con fotos suyas que buscan la levitación. ¡Ya lo verá!
desde Santurce a Bilbao...
En salense:
desde Salas a Grao
voy corriendo por la calea,
con el pie levantao
pa no ir muy deprisa,
desde Salas a Grao
díjome Zapateiro
que taba todo arreglao
pa escornase por la vía,
desde Salas a Grao
acelera Fermín a tope,
ye el único lanzao
desde Paraxes a La Doriga,
etc., etc.
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