LA VOZ DE ASTURIAS 23-07-10 El ajuste de Fomento deja a Asturias sin autovía entre Salas y La Espina

El recorte en las infraestructuras.

El proyecto se adjudicó por 41 millones y debería haber concluido hace ya seis meses. José Blanco anuncia que podrán realizarse actuaciones en Gijón con la iniciativa privada.

E. G. BANDERA L. FERNANDEZ

Un recorte "severo y necesario", en palabras del propio ministro de Fomento, José Blanco, que afectará al 20% de las 1.166 actuaciones de más de un millón de euros que se ejecutan en la actualidad en toda España. Y que, en una primera parte que sólo perjudica al 2,7% de los contratos en marcha en las autonomías, se traduce en la rescisión de uno de los 34 que se mantienen en Asturias: la segunda calzada del tramo Salas-La Espina de la autovía Oviedo-La Espina (A-63), que se adjudicaba justo hace tres años por 41 millones de euros y debería haber concluido hace seis meses. Para la segunda parte del ajuste de Fomento, que afectará al 17% de las obras con retrasos en la ejecución de entre uno y cuatro años, habrá que esperar a septiembre por el proyecto de los presupuestos del Estado.

La autovía Oviedo-La Espina, una de las tres prioridades del Principado ante el ajuste presupuestario en infraestructuras junto con la llegada de la alta velocidad y la autovía del Cantábrico, aún tiene en ejecución cuatro tramos (las dos calzadas de Salas-La Espina, Doriga-Cornellana y Cornellana-Salas) y precisamente el contrato que ahora se rescinde corresponde al más retrasado de todos. Con un modificado negativo, al haberse reducido el coste de 41 a 38 millones de euros, las obras llevan prácticamente paralizadas al menos desde principios de año y, de hecho, los presupuestos del Estado de 2010 le destinaban unos 275.000 euros.

CONTINUOS DESPRENDIMIENTOS El ritmo de obra en este tramo, de 11,7 kilómetros de longitud, siempre ha estado supeditado al de la primera calzada, que sí tiene prevista su entrada en servicio antes de que finalice este año y que así era ratificado por Blanco este mes en la inauguración de la conexión entre Grado y Doriga. Ambas calzadas fueron adjudicadas a empresas diferentes y estuvieron afectadas por continuos desprendimientos que obligaron a demorar las obras. La primera calzada estaba prevista inicialmente para diciembre de 2008. El último calendario para la conclusión completa de la autovía se situaba en 2011. Los otros dos tramos pendientes mantienen un buen ritmo, aunque su conclusión deberá esperar a lo que se decida en septiembre.

El contrato rescindido en Asturias es uno de los 18 que seguirán el mismo camino en el conjunto de España y que suponen una inversión de 838 millones de euros. Blanco, que volvió a priorizar la variante de Pajares y dijo que se acometerá "alguna actuación" en Gijón dentro del Plan Extraordinario de Fomento (PEI), anunciaba ayer que se cancelarán 32 contratos en total. De ellos, 14 volverán a licitarse de nuevo (12 mediante colaboración público privada y dos con cargo al presupuesto ordinario una vez que se defina la solución constructiva más eficiente) y los 18 restantes --entre los que se incluye el del tramo de la A-63-- se rescinden en principio sine die .

Fuentes de Fomento explicaban ayer que esta rescisión no significa, en todo caso, que se abandone el proyecto, sino que "se retomará cuando sea posible" y así lo permita el escenario presupuestario, que ahora obliga a recortar 6.400 millones de euros de la inversión prevista por el ministerio durante 2010 y 2011. Asturias no es una de las comunidades más afectadas por la rescisión de contratos, del que se libran seis autonomías (Canarias, Castilla-La Mancha, Navarra, Baleares, La Rioja y País Vasco).

Las más afectadas, por el número de obras rescindidas, son Castilla y León, con siete contratos anulados de los 80 en marcha, y Cataluña, con cinco de 182. Y, porcentualmente, las más castigadas son Cantabria y Aragón, con una suspensión del 22% y el 12% de los contratos de obra nueva, respectivamente. En Asturias, ese porcentaje es de un 3% y, por debajo, sólo tiene a cuatro comunidades con niveles que oscilan entre el 1,9% y el 2,7%.

Si este verano comenzará la licitación de las obras de colaboración público privada que se contempla en el PEI, que movilizará 17.000 millones de euros, hasta septiembre no se definirán los 199 contratos que se verán afectados por los retrasos de entre uno y cuatro años. Una cifra, en todo caso que no está cerrada por si las empresas prefieren realizar nuevas licitaciones. También en septiembre se creará una subcomisión para fijar los criterios de actualización del Plan Estratégico de Infraestructuras y Transportes (PEIT).

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"No nos podemos dar por vencidos", asegura el alcalde de Salas
El alcalde de Salas, José Manuel Menéndez, realizaba ayer una valoración negativa, "de tristeza y preocupación, pero no de claudicación", ante la rescisión del contrato de la segunda calzada de Salas-La Espina. "No nos podemos dar por vencidos. El tramo se encontraba ya parado por los múltiples problemas que genera la competencia de la obra con la primera calzada", dijo, confiando en que la suspensión sea por el mínimo plazo de tiempo posible y asegurando que "no cejaremos en nuestro empeño".

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