LA NUEVA ESPAÑA 21-07-07 Fomento da de plazo hasta 2010 para acabar la autovía entre Salas y La Espina

El Gobierno del Principado se había comprometido a finalizar las obras del corredor del Suroccidente en 2009

Oviedo, María ALONSO
Las obras de la autovía de Oviedo-La Espina no estarán terminadas en 2009 tal como estaba previsto. O, al menos, ésa es una posibilidad que queda abierta en los plazos oficiales.
La Sociedad Estatal de Infraestructuras del Transporte Terrestre adjudicó ayer las obras de la segunda calzada entre Salas y La Espina. El plazo de construcción de este tramo es de 30 meses, según el Ministerio que dirige Magdalena Álvarez, por lo que los trabajos no deben estar terminados, al menos, hasta principios de 2010. Lo habitual es lo contrario: que las obras se demoren sobre el plazo previsto. El compromiso de acabar la autovía en 2009 también fue asumido por el delegado del Gobierno en Asturias, Antonio Trevín.
El tramo, de 11,6 kilómetros, costará 41 millones de euros y la obra la ejecutará la unión temporal de empresas formada por Peninsular de Contratas y Ortiz Construcciones y Proyectos.
El trazado de la segunda calzada se proyecta junto al de la primera por la margen izquierda, salvo en el tramo correspondiente a la travesía de la sierra de Bodenaya, donde se aleja ligeramente para adaptarse a la ladera evitando afecciones a la carretera nacional 634. El proyecto incluye el acondicionamiento de tres enlaces, dos con la carretera N-634 y uno con la autonómica AS-216 en Tineo. Además, están previstos siete viaductos, la prolongación de seis pasos superiores y uno de fauna, así como la ejecución de cinco muros.
Salvar La Espina fue siempre el principal reto de la autovía que vertebrará el occidente interior. Las obras de la primera calzada de Salas-La Espina fueron adjudicadas en octubre de 2004 con un plazo de ejecución de 34 meses. Finalmente se terminarán en 2008, con más de un año de retraso sobre lo inicialmente previsto debido a los problemas existentes con la disponibilidad del terreno y las modificaciones realizadas para permitir que los viaductos puedan ser ampliados cuando se construya la segunda calzada. Los casi doce kilómetros que van de Salas a La Espina salvan una diferencia de altitud de 500 metros y solamente la primera calzada costará más de cien millones de euros. Los retrasos vienen desde el principio ya que los trabajos, por la falta de disponibilidad de los terrenos, no pudieron empezar hasta la primavera de 2005.