LA VOZ DE ASTURIAS 28-01-10 El juez absuelve al veterinario acusado de falsear documentos

Juzgado de Grado. Foto:ALEXIA E. MARTIN
El fallo recoge que la denuncia que puso el titular de la explotación es falsa.El magistrado urge abrir diligencias contra el ganadero y su empleado.

ALEXIA E. MARTIN
El magistrado del Juzgado de lo Penal número uno de Oviedo acaba de absolver al veterinario de Salas acusado de falsear un certificado y un documento oficial. La sentencia del juez, que hizo ayer pública el abogado del veterinario, Maximino Alvarez, absuelve al profesional y constata que la denuncia interpuesta contra F.J.P.M. es "falsa en todos los extremos".
Además, el juez ordena remitir al Juzgado de Grado el testimonio de la querella y el escrito de la acusación para que se inicien diligencias contra el ganadero "por acusación y denuncia falsa". Asimismo, exige que se abran diligencias contra un empleado del ganadero que prestó declaración en el juicio "por falso testimonio". El letrado del veterinario anunció que su cliente se personará como acusación particular.
Asimismo, la sentencia impone la condena de costas al ganadero "puesto que obró de mala fe al actuar a sabiendas de que el acusado no había llevado a cabo la falsificación de los documentos escritos, y sabía que su contenido era veraz y no alteraba la verdad".
ANTECEDENTES Los hechos se remontan a enero de 2005, cuando F.J.P.M., como veterinario habilitado por la consejería de Medio Rural, elaboró un certificado de autorización sanitaria sobre animales para el sacrificio de una vaca en matadero con destino al consumo humano. Ese mismo día de enero, el veterinario cubre en documento oficial de la consejería los datos de la explotación y el impreso de la declaración del titular de la explotación, que éste firma.
Al día siguiente, el ganadero acude con la res al matadero central y el laboratorio de Salud Pública del Principado detecta en el hígado del animal sustancias nocivas para la salud, por lo que impone una sanción al ganadero de 15.026 euros. Meses después de la confirmación de esta sanción, el ganadero interpone la querella
El magistrado señala en el fallo que el veterinario "no alteró la verdad al emitir el certificado de las actuaciones y en la vista oral no se probó que fuese falso o presentara una mutación de la realidad"; y añade que el ganadero "era conocedor de la veracidad del certificado" y que "las precisiones de la acusación son juicios de valor que no afectan a la veracidad del certificado".
Respecto al presunto delito de falsificación de documento oficial, el juez destaca que "fue firmado por el ganadero".

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