31 diciembre, 2005

LA NUEVA ESPAÑA , LA VOZ DE ASTURIAS 31-12-05 Inaugurado el tramo de autovía Trubia-Llera

La Nueva España

Avilés, M. ALONSO
Los tres tramos de autovía abiertos ayer han dejado al aeropuerto de Asturias a 23 minutos del centro de la región, y Grado, a 12 minutos de Oviedo, según las cuentas realizadas por la Demarcación de Carreteras en Asturias. Los 15,3 kilómetros entre Tamón y Vegarrozadas y los poco más de cuatro kilómetros de Trubia-Llera han cambiado notablemente los tiempos de desplazamiento en el centro y suroccidente de la región, que se han reducido. El tramo de Trubia-Llera dejará Oviedo a doce minutos de Grado, a veinticuatro de Cornellana, a treinta y siete minutos de Salas y a una hora de Cangas del Narcea. Los alcaldes del Suroccidente coincidían ayer en señalar la importancia histórica que supone la apertura de este tramo, que acerca el Occidente al centro
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La Voz de Asturias

ANDRES SUAREZ
Todos los tramos de la autovía del Cantábrico --salvo Otur-Villapedre-- y del corredor entre Oviedo y La Espina estarán en obras o en servicio en el 2006. A lo largo de un ejercicio que promete ser prolífico en inauguraciones también se iniciará el estudio informativo de la futura conexión de alta capacidad entre ambas infraestructuras, que partirá de La Espina y llegará a Valdés. Así lo avanzó ayer la ministra de Fomento, Magdalena Alvarez, que visitó fugazmente Asturias para inaugurar los ramales entre Tamón y Vegarrozadas y entre Trubia y Llera. Casi 20 kilómetros de carretera que han supuesto una inversión de 190 millones de euros
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Una buena noticia para los habitantes del concejo de Grado, pero también para los de Salas y los del Suroccidente asturiano en general. Esta autovía, la de Oviedo-Salas-La Espina, es indispensable si los habitantes de estos concejos queremos tener unos accesos más cómodos, rápidos y seguros con, sobre todo, el centro de la región; es algo que redundará en beneficio de muchas de las necesidades que ahora tenemos planteadas. Lo mismo podemos decir con respecto a vía de alta capacidad entre La Espina y Valdés.
Indudablemente, estamos seguros de que se habrán sacrificado algunos lugares de valor ecológico y algunos intereses de particulares, pero en la balanza de necesidades no hay duda de que la creación de esta autovía ha tenido que pesar más que lo anterior. Lo ideal, y lo que deseamos, es que haya habido la irrenunciable compensación en esos dos aspectos. Si las mejoras de las comunicaciones son indispensables, el respeto por el medio ambiente y los intereses de los particulares nunca se han de sacrificar sin que se vean totalmente recompensados de una u otra forma. La responsabilidad de los políticos es quien debe cumplir en estos casos.