LA NUEVA ESPAÑA 14-09-10 De Rodiezmo a Cornellana

Crónica de una semana con marcado protagonismo asturiano

LUIS ARIAS ARGÜELLES- MERES
Qué semana más atípica y, al mismo tiempo, qué llena de protagonismo asturiano! Tras el acto de Rodiezmo, con Guerra de telonero, con Villa volviendo por sus fueros, con Areces despidiéndose, con Zapatero como gran ausente, con el señor Méndez con el corazón partido y con la cabeza desconcertada, los mineros, en Asturias y León, vuelven a las barricadas cortando carreteras ante un futuro peor que imperfecto que tiene como horizonte 2014. Pero la ceremonia de los adioses de Areces no concluyó en Rodiezmo, también se despidió como presidente de Asturias en el santuario de Covadonga, donde la izquierda plural y transformadora acude cada 8 de septiembre sin haber separado la fiesta cívica de la religiosa desde la preautonomía a esta parte con la excepción del marquesado.
Enric Juliana acaba de publicar en los últimos días tres artículos sobre Asturias, con la minería como denominador común, abordando en el más reciente la tan traída y llevada hipotética candidatura de Cascos a la Presidencia de Asturias que tantas pasiones levanta entre sus detractores y admiradores, con algunas claves interesantes, al margen de filias y fobias en su propio partido. Sería de desear que nuestros políticos reparasen en los mencionados artículos.
A propósito de nuestros políticos, ¿cómo es posible explicarnos que don Álvaro Cuesta en una entrevista que acaba de publicar LA NUEVA ESPAÑA se limita a despotricar contra Rajoy y, sin embargo, no parece preocupado por los recortes que en materia de infraestructuras Asturias está sufriendo a resultas de las decisiones del Gobierno de su partido? ¿Y qué decir de la intervención de don Javier Fernández en el pozo Funeres? Está cargado de razón cuando critica la benevolencia con la que algunos dirigentes del PP, como el señor Mayor Oreja, hablan del franquismo. Pero, al lado de esto, don Javier tenía que preguntarse si el Gobierno socialista está siendo consecuente con el legado de Pablo Iglesias o si lleva muchos años traicionándolo desde el enriquecimiento rápido que contó con la bendición de Solchaga hasta los recortes del actual Gobierno de Zapatero en materia de salarios, pensiones y reforma laboral.
Y, hablando de despedidas, ¿habrá tocado techo el alcalde de Oviedo con su debilidad por la brocha gorda cuya última entrega fue el pregón mateíno a cargo de Los Morancos, que está tan a tono con parte de los últimos eventos culturales en la Laboral de nuestras entretelas e impuestos? Y, hablando de despedidas, ¿habrá voluntad política de corregir las adjudicaciones y contratos de la Administración asturiana, manifiestamente mejorables según publica este periódico, o nos volveremos a encontrar con episodios en los que Europa niegue la validez de determinados proyectos que fueron anunciados en su momento con excesivo triunfalismo?
De Rodiezmo a Cornellana. En la rotonda que da acceso a la autovía de La Espina, la misma que el Gobierno de España decidió no concluir sus obras, que da acceso a Doriga, en la lluviosa mañana del 12 de septiembre, los mineros cortaron el tráfico. Me llamó mucho la atención su presencia por estos lares. Porque no puedo no preguntarme por el futuro de estas comarcas, que llevan tiempo sufriendo un abandono inadmisible, pero que, desde el verano a esta parte, con el anuncio de la rescisión de la segunda calzada entre Salas y La Espina, en la que ya se invirtió mucho dinero, el mazazo fue de una dureza extrema, y ningún representante político se manifestó al respecto con la contundencia que exige la gravedad de la situación. Por parte del PSOE, sólo Villa y un dirigente ugetista del Suroccidente mostraron su rechazo de forma inequívoca. Son los mineros los que cortan aquí la carretera denunciando con ello su crispación, pero, al mismo tiempo, ponen a estas comarcas en el mapa de la actualidad política astur. Por eso, no puedo no centrarme en una semana que, políticamente, arrancó en Rodiezmo y tuvo su cierre en Cornellana. A las dos de la tarde se reanudaba el tráfico, pude ver neumáticos que aún humeaban.
Mientras ello sucedía, Álvarez-Cascos, sin hacer mención a lo que viene sucediendo en su partido en Asturias con su hipotética candidatura, denunciaba en su discurso el abandono que está sufriendo nuestra tierra por parte del Gobierno español, citaba al padre Feijoo, a Jovellanos y a Ortega y se refería también a la emigración asturiana y gallega como uno de nuestros principales rasgos distintivos. Pero, ¡ay!, para nada aludió a los planteamientos que hizo sobre la minería el eurodiputado de su partido el señor Vidal-Quadras. De todos modos, el discurso de Cascos estuvo, una vez más, muy por encima de la chabacanería de Gabino y, sobre todo, puso de relieve la necesidad de hacer frente al abandono que sufre Asturias. No lo hace el PSOE por el señoritismo político del que no sale, y el PP asturiano no pone en ello el énfasis necesario, pues prefiere reservar sus energías para conspirar en contra o a favor del ex ministro de Fomento. ¡Así nos va!
¡Qué tamaño juego de contrastes entre Rodiezmo y Cornellana, entre el 5 y el 12 de septiembre! Fueron días en los que la vida pública asturiana crujió, fueron días en los que el deterioro político rinchó.
¡Qué paradójico puede parecer que un sector como la minería del carbón, cuyo declive es innegable, encabece la expresión del malestar generalizado que vive Asturias, hasta ahora silente y aturdido!

http://www.lne.es/opinion/2010/09/14/rodiezmo-cornellana/967546.html