05 diciembre, 2009

LA NUEVA ESPAÑA 05-12-09 La hostelería de Cornellana da por muerto el negocio en torno a la pesca del salmón

Los empresarios rechazan la última normativa regional que suprime el campanu y aseguran que la actividad dejó de dar dinero hace un lustro

Cornellana (Salas), Lorena VALDÉS
Las paredes de los establecimientos hosteleros con más tradición de Cornellana (Salas) son auténticos museos de la pesca del salmón en el río Narcea. Las fotografías en blanco y negro y los recortes de periódico que informaban de éxitos en las capturas son el testimonio gráfico de la época dorada que vivió la localidad como capital del salmón, durante décadas. Sin embargo, todo eso es ya leyenda. Los hosteleros aseguran que el declive del negocio del salmón comenzó hace un lustro, aproximadamente, y que la última normativa, la más restrictiva de toda la historia de Asturias (entre otras cosas, prohibe pescar el campanu en marzo), será la gota que colme el vaso de las ilusiones de pescadores y empresarios.
Ana Menéndez, propietaria de la cafetería y confitería «Casino», recuerda cuando con tan solo 17 años se hizo cargo del establecimiento junto a su marido. «En el río se pescaban 30 salmones diarios de media y el Narcea era una maravilla todo el mundo venía a pescar aquí. Abríamos a las cinco de la mañana para vender los artilugios y cerrábamos a las tantas. En Cornellana existía un turismo de pesca muy rentable, pero eso ya es historia».
La empresaria asegura que «las normas restrictivas del Principado de los últimos años no han dado ningún resultado positivo. Existe un problema muy grave pero de momento no hay soluciones eficaces». El hostelero Marcos Torres está convencido de la última normativa sobre pesca del salmón «va a terminar con tradición del Narcea, Cornellana siempre fue una gran fiesta con la pesca del campanu y ahora quieren terminar con todo». Él y su mujer son la tercera generación de la familia que se ocupa del negocio «Casa Grana», fundada en 1931 por José Grana Menéndez, gran amante de la pesca. En la barra del bar, un cartel anuncia: «Hay salmón a la plancha del río Narcea». Marcos Torres puntualiza: «Es un mero elemento de decoración, la prohibición de que los restaurantes pudiésemos comercializar con los salmones del Narcea fue uno de los detonantes de la situación actual». El empresario asegura que «ahora el pescador del Narcea es un ribereño que no consume prácticamente; se vivía de la pesca cuando venía a pescar gente de hasta Arabia Saudí».
Una de las opiniones más pesimistas del sector la ofrece el encargado del hotel «La Fuente», Francisco Abad. «La pesca del salmón no repercute en absoluto en el negocio, no hay peces y la gente no viene a Cornellanana. Así de sencillo». En el hotel, los cuadros de pesca recuerdan que un día el establecimiento fue parada obligada para los pescadores. De hecho, la habitación 300 en la que tantas veces durmió Francisco Franco en sus visitas al Narcea permanece prácticamente intacta. El salmón es una especie en peligro de extinción tanto que en Cornellana los pescadores de toda la vida sólo tienen un sueño: «Pescar el año que viene uno para poder congelarlo y comerlo en Nochebuena».
«El declive del salmón en el Narcea ha sido drástico en los últimos cinco años»
Hostelera
«La pesca ya no repercute prácticamente en la economía de la zona»
Hotelero
«Con la última normativa se va a terminar con la tradición salmonera»
Hostelero


http://www.lne.es/occidente/2009/12/05/hosteleria-cornellana-da-muerto-negocio-torno-pesca-salmon/843793.html