LA NUEVA ESPAÑA 20-08-10 El Principado defiende a Blanco mientras los alcaldes del PSOE se rebelan contra el recorte
Los regidores de Tineo y Salas piden a Fomento que no postergue la autovía del Suroccidente para dar prioridad a la cantábrica.
Oviedo / Gijón,
M. CASTRO / J. A. ARDURA
El Principado rechazó ayer las críticas realizadas por la patronal asturiana al ministro de Fomento, José Blanco, en las que pedían al Gobierno regional que hiciera más fuerza en Madrid para evitar la paralización de las principales infraestructuras de la región. La respuesta del consejero de Infraestructuras, que pidió respeto para la gestión del Ejecutivo regional, contrasta con la actitud de los alcaldes socialistas del Suroccidente, que están dispuestos a meter presión «en todas las instancias posibles» para que no se paralice la construcción de la autovía Salas-La Espina, una de las más afectadas por el recorte presupuestario. La Federación Socialista Asturiana evitó ayer valorar la postura de sus alcaldes. Llama la atención que sea el Principado quien eche el capote a José Blanco cuando son conocidas las tensas relaciones entre el Ministro y el arecismo.
Francisco González Buendía, consejero de Infraestructuras, respondió ayer con tanta brevedad como contundencia a la demanda realizada por la patronal asturiana al Principado para que plante cara al Gobierno central con el objetivo de salvar la obra pública en Asturias. El presidente de la patronal de la construcción, Serafín Abilio Martínez, emplazó al Ejecutivo regional a defender ante Madrid «las inversiones comprometidas y los calendarios» mientras que el presidente de la FADE, Severino García Vigón, planteó que el Gobierno de Vicente Álvarez «tiene la obligación de gobernar hasta el último minuto».
Buendía respondió a los constructores y a los empresarios que el Ejecutivo autonómico no necesita recomendaciones de nadie para desarrollar su labor de gobierno: «El Gobierno tiene su forma de hacer las cosas. Creo que no nos ha ido mal hasta ahora y seguiremos haciendo las cosas como las sabe hacer el Gobierno, sin necesidad de que nos recomiende o aconseje nadie nada». Esta reacción del Consejero no fue comprendida del todo por la patronal, que matizó que su intención era «ayudar» y reforzar la posición del Gobierno autonómico ante Madrid, según argumentaron fuentes de FADE. Tras conocer la reacción de Buendía, el presidente de la patronal, García Vigón, reiteró el mensaje lanzado desde su asociación: «Lo que está dicho está dicho; tienen que gobernar hasta el último minuto», para matizar: «Yo creo que lo están haciendo».
La posición del consejero de Infraestructuras, que eludió las críticas al Gobierno central, encontró el contrapunto en el apoyo incondicional mostrado por los alcaldes socialistas del suroccidente asturiano a la reivindicación sobre la autovía Salas-La Espina, que se plasmó el pasado miércoles con una concentración convocada por la organización agraria COAG. Tanto el alcalde de Salas, José Manuel Menéndez, como el de Tineo, Marcelino Marcos Líndez, ambos del PSOE, apoyaron con su presencia la reivindicación.
«El Suroccidente sin esta vía no tiene ninguna posibilidad de vida», sostuvo ayer el alcalde salense. José Manuel Menéndez destacó que «hay una línea muy directa con todos los actores implicados como el delegado del Gobierno, la FSA y el propio ministro» y advirtió que la obligación de los ayuntamientos «es hacer toda la presión posible, mediante el uso de la diplomacia, para que el recorte afecte lo menos posible», al menos a la primera calzada entre Salas-La Espina y los tramos Doriga-Cornellana y Cornellana-Salas. El regidor de Salas considera que el foco y la presión para evitar el recorte de Fomento se están situando sobre la Autovía del Cantábrico, cuando la vía del Suroccidente «recuperará un tercio del territorio de Asturias que está infrautilizado, sin vida, sin actividad, y su revitalización impulsaría a toda Asturias».
El alcalde de Tineo, Marcelino Marcos Líndez, añadió que la movilización responde a «la preocupación para que las obras se prolonguen en el tiempo en los tramos Doriga-Cornellana y Cornellana-Salas y al escepticismo de que se inyecten nuevos recursos a unas obras que presentan un alto grado de ejecución». Líndez manifestó que la paralización de la autovía del Suroccidente supondría un duro golpe al desarrollo de toda la comarca y puso como ejemplo que «muchos inversores han apostado por el polígono de La Curiscada y hay que darles salida». El alcalde de Tineo asumió que se ejerce presión en todos los ámbitos porque los gobiernos socialistas, «al margen de la población, siempre han defendido políticas de solidaridad territorial y la autovía Salas-La Espina vertebra territorio».
«El Suroccidente sin esta vía no tiene ninguna posibilidad de vida ni de futuro»
«Nadie entiende que se paren unas obras que presentan tan alto grado de ejecución»